Confesaron el valor de sentimientos pasados. Redescubrieron la importancia del corazón. Creyeron que podrían retomar viejos credos. Lo hicieron con algunos tropiezos. Escribieron.
Mi lista de blogs
jueves, 25 de febrero de 2010
DESPUÉS DE LEER A ANDRÉ MALRAUX
Giras la página y no encuentra nada y la vida explota en todo su esplendor por los caminos de la existencia y entonces vivir es una tarea sabrosa. Quieres llorar simplemente porque llorar es un acto humano, porque las lágrimas nos dejan más cerca de las personas que sufren. Las lágrimas nos hermanan con todos los seres miserables del mundo. Piensas en la fuerza que tiene el mal, que es capaz de apagar una vida en segundos, en aquellos hombres que sirven a la maldad como a una religión. Permaneces en silencio observando el vacío entre las nubes, piensas que nada puede justificar la muerte de un sólo ser humano. Piensas en lo absurdo que significa el peso de la vida para tanta gente, quieres animarte, intentas ver las cosas de forma diferente, tienes esperanza y sueñas que el mundo pueda ser mejor, que los hombres aprenderán un día a convivir sin sacarse los ojos. No quieres negarte ese pequeño optimismo, observas a los hombres que siguen buscando resto de comida en los basureros, sabes que preferirías cerrar los ojos. Ves a aquél niño, lleno de vida, que salta de alegría al encontrar un pedazo herrumbrado de una bicicleta e intentas sonreír, pero te das cuenta que el dolor es mayor y te sientes humillado por el hecho de que eres humano.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
Una frase dura “te sientes humillado por el hecho de que eres humano” también el texto afirma “vivir es una tarea sabrosa” frases antagónicas, como antagónica la vida del hombre hoy día.
ResponderBorrarEl texto nos toca en la medida que habla de nuestra pobreza espiritual, ahí uno se pregunta ¿por qué la cabeza y aquí incluyo intelecto, racionalidad, por qué toda esta riqueza casi nunca la ponemos al servicio de los sentimientos?, ¿Por qué es más fácil cerrar los ojos ante la injusticia y el dolor del otro?, ¿Por qué preferimos ignorar nuestra soledad, nuestro sentir, por qué sentir vergüenza de llorar, de sentir miedo? Es como si una fuerza colectiva, de una manera implícita nos quitara el derecho de nuestra naturaleza. Imagino que esto es un síndrome propio de los hijos de esta época cibernética. Ser hombres autoexiliados de nuestra propia existencia.
..."Hombres que sirven a la maldad como a una religión"
ResponderBorrarMe llama la atención esta frase.Pensamiento concretizado en la historia de terror realizada por Hitler en el siglo pasado.Hay momentos dentro del escenario de la historia donde vemos al hombre comportándose como enemigo de su "propia humanidad" abriendo la caja de Pándora, ocasionando con el mal y su injusticia, el sufrimiento más hay algo que no puede ser aniquilado, ni sustraido de aquél que sufre, y es su libertad, ésa que le dá fuerza para enfrentar su realidad cotidiana, y mismo que intentaran coartar esa libertad a través de una prisión, o imponiendo el silencio;esa libertad no puede ser afectada porque dentro del fuero interno de cada ser humano nadie toca, nadie puede sujetar su pensamiento,su capacidad de soñar,de darse ánimo, de mantener la esperanza, de proyectarse, porque ésto hace parte de la esencia misma del "ser humano" .